Descubra las virtudes del jade y la jadeíta guatemalteca
El jade, que simboliza la armonía y la paz interior, tiene un profundo significado en las culturas maya y azteca de México. Considerado como una piedra sagrada, está estrechamente vinculado a lo invisible, lo inmortal y el misterio universal. Usado durante ceremonias, el jade guatemalteco tiene el poder de despertar el conocimiento oculto e invitar a la iluminación espiritual.
Físicamente, el jade transmite una sensación de paz y dulzura, fomentando la meditación gracias a sus propiedades calmantes y relajantes sobre los nervios. Psicológicamente , ayuda a estabilizar la personalidad e integrar la mente con el cuerpo, ayudando a disipar los pensamientos negativos y a estimular las ideas.
Emocionalmente , el jade despierta sueños intuitivos y nos conecta con la belleza de la creación, fortaleciendo los lazos del corazón y promoviendo la liberación emocional, particularmente aliviando la irritabilidad.
Físicamente, el jade tiene efectos beneficiosos sobre los riñones y la vejiga, al tiempo que estimula la circulación sanguínea a través de su vibración energética.
En resumen, el jade y la jadeíta guatemaltecas son mucho más que simples piedras. Son guardianes de la armonía, la protección y la sabiduría, invitando a quien los porta a sumergirse en un estado de profunda tranquilidad y conexión espiritual.